El metabolismo es el conjunto de todos los procesos que permite a nuestro cuerpo mantenerse con vida. La velocidad metabólica, la tasa de trabajo del cuerpo, el metabolismo energético, son términos que ahora son comunes en nuestro vocabulario, mencionados con frecuencia en periódicos y revistas. Conscientemente o inconscientemente, muchos de nosotros combinamos los cambios en nuestro cuerpo con el metabolismo. Las personas delgadas suelen presumir de un metabolismo activo, mientras que las personas con sobrepeso a menudo culpan a su metabolismo lento. Entonces, ¿qué es el metabolismo y cómo funciona? Vamos a examinarlo.
De hecho, desde un punto de vista científico, el metabolismo de las personas delgadas es más lento que el de las personas con sobrepeso. Al igual que una gran máquina consume más energía que un pequeño electrodoméstico, un cuerpo más grande quema más combustible que un cuerpo más pequeño. La cantidad de combustible que usas todos los días es tu velocidad metabólica.
El 70% de la energía que gastas diariamente se compone de la Tasa Metabólica Basal. La tasa metabólica basal es la energía que el cuerpo gasta en reposo. Podrías tener la impresión de que tu cuerpo está en reposo cuando estás en reposo. En realidad, tu hígado está trabajando constantemente para eliminar toxinas. Tu cerebro mantiene todo en orden incluso mientras duermes, tu corazón late y la sangre circula por tus venas. Se producen muchos eventos metabólicos similares en el cuerpo. Para llevar a cabo estos eventos, el cuerpo gasta energía, que es la tasa metabólica basal.
Después de la tasa metabólica basal, otro evento que consume energía en el cuerpo es la actividad termogénica. El Efecto Térmico de los Alimentos es el aumento en la tasa metabólica después de la digestión de los alimentos. Representa alrededor del 10% del consumo diario de energía. Alcanza su punto máximo una hora después de la comida y desaparece después de 4 horas. El efecto térmico de los alimentos varía según los tipos de alimentos. Los alimentos sólidos producen más calor que los líquidos, los carbohidratos complejos producen más calor que las grasas, la fructosa produce más calor que la glucosa, y las grasas insaturadas producen más calor que las grasas saturadas. Al elegir estos alimentos, gastarás más energía. Por ejemplo, prefiera consumir frutas en lugar de jugo de frutas.
Finalmente, otro evento que genera energía en el cuerpo es la actividad física. Todas las actividades conscientes que realizas durante 24 horas forman parte de la actividad física. Sentarse, levantarse, caminar, correr, comer, hacer deporte, nadar, andar en bicicleta son ejemplos de actividades físicas. La actividad física normal representa aproximadamente el 20% del consumo diario de energía. Si aumentas tu nivel de actividad, también aumentará el gasto de energía. Un ejercicio intenso puede marcar una gran diferencia en la cantidad de calorías quemadas. Caminar al trabajo, elegir las escaleras en lugar del ascensor, lavar tu coche tú mismo, todas estas pequeñas cosas aumentarán tu velocidad metabólica.
En algunas circunstancias, el metabolismo puede disminuir debido a una influencia externa. Esto puede deberse a algunas razones fisiológicas. Por ejemplo, en las personas que sufren de hipotiroidismo, donde las hormonas tiroideas se secretan insuficientemente, el metabolismo se ralentiza. Además, algunos medicamentos que contienen cortisol también pueden mostrar este efecto. Una vida sedentaria constante también puede reducir tu velocidad metabólica. La edad también es un factor importante. A medida que envejecemos, el metabolismo disminuye. Especialmente la menopausia puede ser un factor que contribuye a la disminución del metabolismo en las mujeres.
De hecho, desde un punto de vista científico, el metabolismo de las personas delgadas es más lento que el de las personas con sobrepeso. Al igual que una gran máquina consume más energía que un pequeño electrodoméstico, un cuerpo más grande quema más combustible que un cuerpo más pequeño. La cantidad de combustible que usas todos los días es tu velocidad metabólica.
El 70% de la energía que gastas diariamente se compone de la Tasa Metabólica Basal. La tasa metabólica basal es la energía que el cuerpo gasta en reposo. Podrías tener la impresión de que tu cuerpo está en reposo cuando estás en reposo. En realidad, tu hígado está trabajando constantemente para eliminar toxinas. Tu cerebro mantiene todo en orden incluso mientras duermes, tu corazón late y la sangre circula por tus venas. Se producen muchos eventos metabólicos similares en el cuerpo. Para llevar a cabo estos eventos, el cuerpo gasta energía, que es la tasa metabólica basal.
Después de la tasa metabólica basal, otro evento que consume energía en el cuerpo es la actividad termogénica. El Efecto Térmico de los Alimentos es el aumento en la tasa metabólica después de la digestión de los alimentos. Representa alrededor del 10% del consumo diario de energía. Alcanza su punto máximo una hora después de la comida y desaparece después de 4 horas. El efecto térmico de los alimentos varía según los tipos de alimentos. Los alimentos sólidos producen más calor que los líquidos, los carbohidratos complejos producen más calor que las grasas, la fructosa produce más calor que la glucosa, y las grasas insaturadas producen más calor que las grasas saturadas. Al elegir estos alimentos, gastarás más energía. Por ejemplo, prefiera consumir frutas en lugar de jugo de frutas.
Finalmente, otro evento que genera energía en el cuerpo es la actividad física. Todas las actividades conscientes que realizas durante 24 horas forman parte de la actividad física. Sentarse, levantarse, caminar, correr, comer, hacer deporte, nadar, andar en bicicleta son ejemplos de actividades físicas. La actividad física normal representa aproximadamente el 20% del consumo diario de energía. Si aumentas tu nivel de actividad, también aumentará el gasto de energía. Un ejercicio intenso puede marcar una gran diferencia en la cantidad de calorías quemadas. Caminar al trabajo, elegir las escaleras en lugar del ascensor, lavar tu coche tú mismo, todas estas pequeñas cosas aumentarán tu velocidad metabólica.
En algunas circunstancias, el metabolismo puede disminuir debido a una influencia externa. Esto puede deberse a algunas razones fisiológicas. Por ejemplo, en las personas que sufren de hipotiroidismo, donde las hormonas tiroideas se secretan insuficientemente, el metabolismo se ralentiza. Además, algunos medicamentos que contienen cortisol también pueden mostrar este efecto. Una vida sedentaria constante también puede reducir tu velocidad metabólica. La edad también es un factor importante. A medida que envejecemos, el metabolismo disminuye. Especialmente la menopausia puede ser un factor que contribuye a la disminución del metabolismo en las mujeres.
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